Proyecto Educativo
Introducción
Una de las manifestaciones de la autonomía de un centro, recogido en el Reglamento Orgánico de las Escuelas de Educación Infantil y de los colegios de Ed. Primaria, es la elaboración y aplicación del Proyecto Educativo de Centro (P.E.C.).
El P.E.C. es el documento que recoge el conjunto de decisiones, de ideas asumidas por toda la comunidad escolar, respecto a las opciones educativas básicas y la organización general del centro.
El Proyecto Educativo constituye un documento de carácter programático que expresa los deseos de la Comunidad Escolar respecto a los principios educativos, organizativos y normativos que inspiran la elaboración de los demás proyectos que articulan la gestión participativa del centro.
Es un instrumento para la gestión que, en coherencia con el contexto escolar, enumera y define los rasgos de identidad del centro, formula los objetivos que pretende y expresa la estructura organizativa de la institución.
Los objetivos del presente documento son:
- Definir nuestras convicciones e intenciones educativas
- Concretar las decisiones respecto a la organización y gestión del centro
- Recoger las grandes pautas orientadoras de nuestra acción en el centro
- Complementar, como documento más ideológico, el plan de actuación del P.E.C.
- Presentar un modelo educativo que atienda a las particularidades de nuestro alumnado
- Ofrecer nuestras señas de identidad para establecer relaciones con otras instituciones.
Contexto
1.- Análisis del Contexto
1.1. ANÁLISIS DE LA REALIDAD DEL CONTEXTO
ESCUELA INFANTIL CUCU TASTAS
C/ Maria Montessori 12-14, Local
50018 Zaragoza
Titularidad: Privada
Niveles de enseñanza
Educación Infantil de 0 a 3 años ( 1 er Ciclo)
Unidades:
- 2 clases de 0-1 años con 8 niños cada una
- 1 clase de 1-2 años con 13 niños
- 1 clase de 2-3 años con 16 niños
Profesorado: 2 Maestras de Ed. Infantil, 2 Técnicos de Ed. Infantil, 1 Auxiliar Educativa
Confesionalidad
La escuela se declara aconfesional y pluralista desde el punto de vista religioso y político, con respecto a todas las creencias e ideologías tanto de los niños como de su familia así como de los miembros del equipo educativo
Principios generales que rigen nuestra línea educativa
La actividad educativa se desarrollará atendiendo a los siguientes principios:
Profundo respeto la singularidad y circunstancias de todos y cada uno de los niños. Atención a las necesidades individuales.
Formación personalizada, que propicie una educación integral en conocimientos, destrezas y valores morales de los alumnos en todos los ámbitos de su vida.
Metodología activa favoreciendo la adquisición de aprendizajes significativos.
Actitudes de respeto hacia las personas y el medio ambiente
Tratamientos de igualdad entre los sexos, rechazo a todo tipo de discriminación y el respeto a todas las culturas.
- La formación en el respeto y defensa del medioambiente
- El desarrollo de las capacidades creativas y del espíritu crítico
- El fomento de hábitos de comportamiento democrático
- La participación y colaboración de los padres para contribuir a la mejor consecución de los objetivos educativos.
- Fomento de actitudes, valores y hábitos: salud, educación del consumidor...
- La actividad investigadora de los profesores a partir de su práctica docente
- La evaluación de los procesos de enseñanza aprendizaje
Servicios Generales:
- Educación Infantil 1er Ciclo (0-3 años)
- Servicio de guardería ( de 7:30 a 9:30 y de 17:00 a 20:30)
- Actividades extraescolares (inglés, psicomotricidad, gabinete de logopedia)
- Comedor
Servicios Pedagógicos:
- Equipo Psicopedagógico
- Equipo de profesores Especializados ( Ed. Infantil, Ed. Especial, Audición Y Lenguaje, Psicomotricista)
- Técnicos especialistas en Ed. Infantil
- Auxiliares Técnicos Educativos
- Educadores de Masaje Infantil. Cursos de masaje infantil
- Apoyo Educativo
- Información y Orientación a las familias
Entorno
2.- El Entorno
2.1. El barrio
La escuela se encuentra situada en el barrio del Actur.
2.2. El Centro
La escuela Cucu Tastas está ubicada en la planta baja de un edificio de viviendas, tiene una superficie de 300 m 2 y un patio de recreo de 2000 m 2
Toda el ala derecha del local se ha destinado a los bebés. Posee entrada independiente desde el exterior. Vestíbulo y 1 baño para adultos. Cuenta con dos aulas de 0 a 1 años independientes pero comunicadas por medio de una puerta; con zona de baño y cambio así como de preparación de biberones y otros alimentos. En una de estas aulas se encuentra la salida al patio, también independiente del resto de las aulas de uno y dos años.
En la parte central del local se encuentra la entrada principal a la escuela infantil, con un gran vestíbulo o recepción desde donde se accede al resto de las instalaciones:
- Cocina, en el centro no se preparan comidas. Se cuenta con servicio de catering escolar.
- Sala de usos múltiples, donde se realizan las sesiones de psicomotricidad, cursos de masaje infantil, y otras actividades. Desde esta sala se accede al almacén de material así como a los vestuarios y duchas del personal educativo.
- Dos aseos para adultos
- Pequeño cuarto de material
- Despacho de Dirección
- Sala de Reuniones
- Pasillo que comunica esta zona con el aula de bebés
- Un aula de 1-2 años con zona de cambio y salida independiente al patio
- Un aula de 2-3 años con zona de cambio y salida independiente al patio.
Estas dos clases poseen los aseos compartidos a los que los niños acceden desde puertas independientes situadas en sus respectivas clases.
2.3. El equipo educativo
El Equipo educativo está compuesto por 2 Maestras en educación infantil, las cuales son además psicomotricistas 2 Técnicos en educación infantil y 1 Auxiliar educativo, 1 Maestra en audición y lenguaje, 1 Maestra en educación especial. La edad media del personal educativo está en torno a los treinta y tres años. Así mismo, la escuela está dispuesta y abierta para recibir alumnos de prácticas: de escuelas de magisterio, de institutos de formación profesional, así como de otras instituciones.
El equipo es estable. Sus miembros, comparten las mismas inquietudes y principios educativos, y los transmite a las personas que llegan nuevas. Es un equipo con ilusión, dinámico, abierto, y con ganas de hacer cosas innovadoras, reflexionando sobre la práctica educativa y participando junto con los demás miembros de la Comunidad Escolar en su organización y gestión.
El trabajo en equipo responde a las necesidades de aprendizaje y profesionalización de los adultos. Posibilita el intercambio y contraste, y simultáneamente, es la base de un objetivo común: conjugar la tarea de todos para ofrecer a los niños, coherencia y unidad en el Proyecto Educativo.
Esto nos permite, a su vez:
- Un aprovechamiento racional de los recursos.
- La distribución de las tareas y la diversificación del trabajo.
- Riqueza de puntos de vista.
- La concesión de respaldo y apoyo a las iniciativas.
- La colaboración en la resolución de conflictos, en la toma de decisiones y en la realización de proyectos.
- La asunción de las funciones propias.
- El intercambio de información y experiencias.
- La negociación, el consenso y la corresponsabilidad en el desarrollo del Proyecto Educativo.
- La formación de personas tolerantes, abiertas y flexibles.
- La aportación de datos y conocimientos sobre las peculiaridades e intereses de todos los sectores y del entorno escolar.
- Una mejora en el grado de satisfacción y en el clima de relaciones de las personas implicadas en el proceso.
Queremos que la escuela sea una realidad integrada y no la suma del trabajo de niveles y ciclos aislados unos de otros, y que los educadores que lo constituyen, formen un equipo coherente, que sean motor de todo el funcionamiento de la misma, llevándolo a la práctica a través de nuestra organización.
Los educadores que componen el equipo educativo han de introducirse en una dinámica de trabajo colectivo, haciendo congruente su forma de entender la educación con la que tiene el resto de componentes del grupo y organizando un equipo de trabajo que sea el eje entorno al cual, gira la vida del centro. Es por ello que en nuestra escuela, valoramos, no sólo que los educadores alcancen un alto nivel profesional, sino que fundamentalmente, tengan actitud y capacidad para trabajar en equipo.
En este sentido promovemos la formación permanente de los educadores facilitando su asistencia a cursos, seminarios, conferencias etc., y consiguiendo, que dicha formación, contribuya posteriormente al enriquecimiento del equipo pedagógico y de la línea educativa del centro. Esto permitirá mejorar la práctica docente y lograr una intervención planificada, coherente y compartida.
Por otro lado, si mejorar la intervención pedagógica es una de nuestras metas, entendemos desde esta perspectiva, la evaluación como una exigencia interna del perfeccionamiento de todo proceso de enseñanza-aprendizaje, y queremos que sea el motor del cambio curricular y de nuestro desarrollo profesional. Consideramos la evaluación, como un medio básico de investigación del profesorado que contribuye a un nuevo perfil profesional de nuestra función en el aula.
Identidad
3.- Señas de Identidad
3.1. Nuestros Objetivos
Consideramos que los objetivo básicos de la escuela infantil son los siguientes:
- Establecer relaciones personales afectivas significativas y satisfactorias
- Contribuir a la estructuración de la identidad del niño conquistando una autonomía y autoconfianza suficientes
- Potenciar el desarrollo del conocimiento y ofrecer la posibilidad de relacionarse e interactuar con el entorno dando salida a sus necesidades de exploración y descubrimiento.
- Promocionar la socialización del niño y ofrecer posibilidades de expresar y comunicar sus experiencias encontrando interlocutores gratificantes
- Estos objetivos básicos los ampliamos en los siguientes:
- OBJETIVOS con los niños y las niñas y con nosotras mismas:
- Posibilitar que: se sientan a gusto y confortables, se expresen con su cuerpo, se hagan "independientes", conozcan los "límites" y saber qué se puede o no hacer.
- Respetar sus necesidades: de movimiento, de expresión y comunicación con las distintas posibilidades que les ofrece su cuerpo, de aprender, conocer, aprehender y comprender, de "ordenar el mundo", de encontrar respuestas a sus dudas e inseguridades, de "crecer".
- Crear espacios y tiempos para la "humanización" (para la creación, la alegría, la bondad, las relaciones,...) Provocar hacia lo creativo. Posibilitar las vivencias de experiencias artístico-culturales, como movilizadoras de nuestra propia sensibilidad.
- Enseñar-aprender como un proceso dinámico y abierto, donde todos los actores nos lanzamos al descubrimiento. Investigar en el sentido de clarificar, de explorar, … "Construir".
- Escuchar en profundidad. Respetar la libertad individual. Creer en las posibilidades del niño. Ser auténticos.
- Respetar y valorar las "diferencias". Personalizar las relaciones con los niños estableciendo lazos de cariño y afecto.
- Generar las condiciones y oportunidades que abren a las personas que estamos en la educación, las posibilidades insospechadas de encuentro, maduración, toma de conciencia, crecimiento y liberación.
- Compartir con los demás una manera de entender la educación. Ser capaces de ponernos de acuerdo con los otros. Reflexionar juntos. Reconocer errores y ser autocríticos. Seguir aprendiendo siempre. Estar en diálogo permanente con el "entorno" estableciendo vínculos de simpatía, confianza, afecto, apoyo, colaboración, reconocimiento..
- Posibilitar que se sea único y diferente. Defender la identidad propia y respetar la de los otros. Crear un clima de libertad e igualdad. Descubrir y vivir la "vida en sociedad". Posibilitar la percepción de "ser en el mundo". Aprender a ser, "sentir" con los otros.
- Saber escuchar y ser escuchado. Poder hablar y opinar. Vivir el grupo. Respetar los intereses. Favorecer las diferentes opiniones, ideas, propuestas,... Sentir que uno forma parte de un "todo". Posibilitar el intercambio (feed-back). Crear condiciones para poder “comunicar". Enriquecerse en el trabajo o en la tarea con los otros.
- Incorporar la naturaleza a nosotros mismos. Sentir felicidad y alegría en relación con la naturaleza. Respetar y defender otras formas de vida. Respetar las diferentes manifestaciones culturales. Sentir inquietud por la "realidad" que viven. Abrir la Escuela al entorno. Provocar el interés por el "mundo".
- Entendemos que los niños y las niñas tienen la necesidad vital de conocer, de comunicarse, expresarse, de autoafirmarse ante el mundo y el adulto; de explorar el mundo, de construir y destruir para reconstruir; y en definitiva, de crear, en un clima afectivo de aceptación y conocimiento que evitará la competitividad, la violencia y el autoritarismo, potenciando en su lugar la comunicación, la cooperación, el trabajo en equipo y la ayuda mutua.
- Creemos necesario mantener una actitud de escucha que nos permita aceptar las demandas y necesidades de los niños así como la capacidad para responder a éstas.
“ El factor más importante que influye en aprendizaje es lo que el alumno ya sabe. Averígüese esto y enséñese en consecuencia” ( Ausubel). A partir de esta frase reflexionamos sobre la interacción que se produce en toda acción educativa. Por una parte, el niño construyendo su propio aprendizaje. Por otra, el profesorado como guía de esa actividad constructiva.
Esto implica, naturalmente, que nuestra labor no puede estar sólamente dirigida a trasvasar conocimientos a los alumnos/as, como si fuéramos máquinas de insuflar ciencia. De aquí proviene la necesidad de una especialización y formación que nos posibilite, no sólo el conocimiento teórico de explicaciones y principios pertinentes para la educación y la enseñanza, sino para inventar, a partir de la práctica, nuevas relaciones con el alumnado. Una formación, por tanto, desde fuera y desde dentro de la propia escuela, de la práctica educativa, tratando de conseguir la necesaria convergencia entre innovación e investigación.
Trabajamos por pequeños proyectos ya que consideramos que los niños son protagonistas de su propio aprendizaje y tomamos, como responsabilidad nuestra, el acompañarles en su proceso de descubrimiento.
3.2. Atención a la diversidad
Aquí TODOS tenemos sitio para ser nosotros mismos, sea cual sea nuestro origen, cultura, ideología, situación familiar, necesidades educativas especiales, ... Creemos en una sociedad diversa capaz de vivir en armonía, entendemos la Escuela como un tiempo y un espacio para la humanización, donde TODOS encuentran su lugar.
3.3. El trabajo corporal
En nuestra escuela concedemos una prioridad fundamental al trabajo corporal y a la psicomotricidad, con los niños y las niñas:
“La psicomotricidad la entendemos, como una manera de concebir a la persona, de entender la expresividad infantil como una globalidad en la que confluyen aspectos motrices, cognitivos y socioafectivos como elementos que configuran la personalidad y que nos permiten su comprensión.” (Miguel Llorca Llinares)
En este sentido, podemos establecer como principal finalidad de la psicomotricidad el desarrollo de competencias motrices, cognitivas y socioafectivas que se ponen de manifiesto a partir del juego y del movimiento. Esta finalidad se alcanzará mediante la educación psicomotriz, que tratará de favorecer el desarrollo global de la persona mediante la utilización del movimiento y del juego corporal, el establecimiento de relaciones con los objetos y con los otros, y como consecuencia, el desarrollo de la identidad y autonomía personal.
La forma de trabajar se basa en la experimentación y descubrimiento del mundo que nos rodea. Porque pensamos, con Lapierre y Aucouturier, que ningún concepto puede ser verdaderamente aprendido si no se ha vivenciado. La participación activa es imprescindible, puesto que queremos que los niños y las niñas se expresen corporalmente, se orienten en el espacio y descubran todas las formas de relación que pueden establecerse con los compañeros y los objetos. Para ello ponemos a su disposición todo tipo de materiales, a partir de los cuales puedan crear juegos y modificar la utilidad del objeto.
3.4. Educar en valores
Igualmente vemos la necesidad de crecer desde nosotras mismas en "valores" y transmitir a los niños una auténtica "educación en valores". Creemos que educar para la paz, la solidaridad,... lleva implícito contribuir al desarrollo armónico de los niños (acercarnos, buscar y ayudar a liberar en el niño todo un mundo lleno de vida y de posibilidades), y que esto pondrá en marcha, sin duda, el camino hacia la humanización de la sociedad.
Educar en valores no es tarea fácil y a menudo es fuente de conflictos pero al ser la educación un proceso de socialización, de interiorización de hábitos, conocimientos y de ideas, conlleva paralelamente, un proceso de transmisión de valores. En este sentido la LOGSE, en su Preámbulo, establece claramente la importancia de la educación afirmando en el párrafo tercero que: "…en la educación se trasmiten y ejercitan los valores que hacen posible la vida en sociedad, singularmente el respeto a todos los derechos y libertades fundamentales, se adquieren los hábitos de convivencia democrática y de respeto mutuo, se prepara para la participación responsable en las distintas actividades e instancias sociales…" y continúa profundizando en el quinto párrafo: "…la educación permite, en fin, avanzar en la lucha contra la discriminación y la desigualdad..."
Es por esto que se hace imprescindible en un Proyecto Educativo explicitar esos valores y establecer las líneas de actuación que éstos determinarán sabiendo, al tiempo, que éstos valores no existen al margen de la dinámica social y no pueden ignorar la realidad socio-económica y cultural ni el marco de referencia donde nos desarrollamos, por lo que, como primer punto, explicitamos los valores constitucionalmente reconocidos en materia de educación como son la aconfesionalidad, la coeducación, la igualdad de oportunidades y los valores democráticos.
Así mismo es importante señalar que los "valores", como tales, no son un "contenido" a impartir dentro del curriculum educativo o que, hablar de valores, implica que nuestros niños y niñas reciban un "adoctrinamiento" al respecto, sino que educar en valores es un trabajo continuo, es crear unos espacios donde se puedan desarrollarlos, es observar unas conductas que permitan comprenderlos, es, al fin y al cabo, "vivirlos" en toda la Comunidad Educativa dentro de una "planificación intencional" donde se hagan presentes. Los temas transversales (Ed. para la Paz, Ed. para la Igualdad de Oportunidades, Ed. para la Salud, Ed. Ambiental, Ed. del Consumidor) abordados de manera amplia en toda la etapa de Educación Infantil y asumidos por sus profesionales, guían las actividades y experiencias de la Comunidad Educativa y suponen la priorización y la concreción en el curriculum de esa educación en valores, traduciéndose en propuestas metodológicas concretas.
Siguiendo este razonamiento se hace evidente la importancia que tiene el "equipo docente" y cada uno de los profesionales que lo integramos, exigiéndonos no sólo un compromiso individual sino, también, un modelo organizativo democrático y participativo y unas líneas metodológicas claras basadas en la investigación, participación, la reflexión, la crítica y la enseñanza activa y constructivista.
En nuestro intenso proceso de reflexión hemos considerado los siguientes valores:
- Respeto y tolerancia
- Propiciar la consideración del otro, niño o adulto, admitiendo los diferentes enfoques y opiniones dentro de un clima de tolerancia, cordialidad y honestidad. Asimismo, promover la valoración de los otros seres vivos, los objetos, y nuestro entorno natural.
- Respeto a la diversidad
- Fomentar actitudes de respeto a "la diferencia" facilitando la aceptación de que las realidades individuales son diversas tanto desde el punto de vista cultural, social y económico como desde el propio individuo. El individuo es "único" por origen, sexo, condiciones sociales, características físicas, aptitudes, estilos cognitivos y afectivos. Nuestro objetivo es propiciar la igualdad de derechos y obligaciones, la no discriminación del individuo, la aceptación de las "diferencias", y el enriquecimiento personal que éstas conllevan.
- Autonomía
- Propiciar el desarrollo integral de los niños en los aspectos físicos, afectivos e intelectuales, facilitando los recursos que favorezcan la toma de iniciativa personal dentro del grupo y que permitan los procesos de introspección y conocimiento del mundo interno, para crear una imagen de sí mismo. En este sentido, hay que favorecer el conocimiento y valoración de los propios limites y posibilidades, potenciando la autoestima y el establecimiento de relaciones sociales con los iguales y los adultos. Es, al fin y al cabo, crear los "espacios" que permitan el desarrollo individual armónico y la inclusión y participación en el grupo.
- Socialización
- Apreciar la función social de la escuela como primer ámbito de relación ampliada del niño donde tendrá su primera experiencia social fuera de su núcleo familiar por lo que se debe facilitar los recursos que permitan al niño establecer las relaciones sociales y afectivas, desarrollando actitudes de colaboración y apoyo que propicien el respeto a las pautas y normas que determina tanto el grupo de referencia, como el grupo ampliado.
- Colaboración
- Transmitir el interés por lo colectivo, por el grupo y la tarea común, promoviendo actitudes de cooperación y ayuda de forma que se facilite la participación, la comunicación y el compromiso de cada uno de los individuos con un objetivo común.
- Creatividad
- Fomentar la utilización de los recursos personales para enfrentarse a las diferentes situaciones creando alternativas y buscando soluciones innovadoras. Propiciar que el niño se enfrente a la realización de tareas y actividades buscando "nuevas formas de hacer", facilitando la investigación, el descubrimiento y la creación de diferentes respuestas.
- Espíritu Crítico
- Fomentar el análisis y reflexión sobre el entorno socio-cultural, promoviendo actitudes flexibles ante otros puntos de vista y de cambio de perspectiva ante la realidad. Facilitar la crítica constructiva que permita al niño modificar su actitud ante sucesos diferentes y conociendo sus propios límites, poder actuar activamente en el medio que lo rodea.
- Responsabilidad
- Propiciar actuaciones en consecuencia con los propios principios y valores, respetando los aceptados por la comunidad escolar de forma que se facilite la iniciativa y la toma de decisiones personales. Si se promueve la evaluación y la reflexión sobre el propio trabajo y el trabajo del grupo, se favorecerá la adquisición de un compromiso individual y colectivo con la tarea y con los individuos.
3.5. Importancia del periodo de adaptación
¿ Por qué es importante para nosotras el periodo de adaptación?
La adaptación supone concebir y programar la integración del niño en el centro como un acto pedagógico importante.
La entrada en la escuela infantil va a suponer para el niño un gran cambio. Implica al mismo tiempo la salida del mundo familiar donde el niño ocupa un rol definido, se mueve en un espacio protegido, conocido y seguro, para introducirse en un mundo de relaciones desconocido y más amplio.
Este cambio supone una dificultad para el niño, que tiene que aceptar la separación de las personas más cercanas y queridas, sobre todo su madre, y adaptarse a un ambiente desconocido.
Esta primera separación del niño-familia constituye un conflicto interno que tendrá que aceptar y superar; pero la manera cómo se resuelva será trascendente para su posterior proceso de socialización y actitud que tendrá para el aprendizaje y para toda su formación. Por otra parte, según la etapa de desarrollo en que se encuentre el niño va a ser diferente el periodo de adaptación a la escuela infantil.
Podemos decir que el periodo de adaptación es el proceso por el cual el niño y la niña va formando y preparando, desde el punto de vista de los sentimientos, la aceptación de un marco nuevo, la escuela.
Como manifiesta Mercedes Conde: “ Lo que merece la pena resaltar es que el núcleo del proceso de adaptación, así como su resolución tiene que ver con los sentimientos , es decir, con el mundo interno ”
El niño siente una gran ansiedad con la separación de su familia, es una separación física e intrapsíquica, a la vez, porque se siente menos protegido y seguro, se encuentra a solas con sus posibilidades, en definitiva se siente abandonado, inseguro, con angustia y miedo. Por todo ello va a necesitar de los adultos y del entorno una gran ayuda y comprensión; en definitiva, sentirse aceptado, entendido y querido.
Metodología
4.- La Metodología
La intervención educativa con niños menores de tres años está estrechamente ligada a la satisfacción de sus necesidades biológicas, pero este hecho hace muy necesaria la estructuración de una metodología coherente.
La manera de organizar y de intervenir en la vida de los niños es más importante cuanto más pequeños son, pues la vulnerabilidad del niño es mayor en los primeros años, y la influencia de estos años es determinante.
En primer lugar, hay que tener en cuenta que el hecho de que el niño sea atendido en grupo en lugar de recibir la atención totalmente individualizada propia del medio familiar hace necesario un diseño muy cuidadoso de la vida del centro. La relación con el resto de los niños no compensa ninguna carencia en la relación con los adultos, de los que depende totalmente para satisfacer sus necesidades individuales y a los que necesita sentirse estrechamente vinculado.
Participamos en la concepción de que los principios metodológicos que deben regir la intervención educativa con los niños y niñas de cero a tres años, están fundamentados en las características del desarrollo, pero sobre todo en las necesidades evolutivas e individuales de los niños.
Nuestros principios metodológicos son los que pasamos a enumerar en los siguientes apartados.
4.1. Actividad del niño: Experiencias Significativas Globales
Concebimos al niño no como el objeto de la educación sino como el protagonista de su desarrollo, supone valorar sus iniciativas, sus intereses de acción y autonomía, darle la ocasión de realizar suficientes experiencias estructurantes, de resolver problemas, de aprender de sus errores, todo ello tanto en los aspectos cognitivos como en la vida emocional.
La actividad del niño tiene sentido, es significativa y por lo tanto contribuye a su desarrollo, cuando responde a sus intereses y puede ser realizada con cierto grado de autonomía, poniéndola en relación con experiencias anteriores de las que partir. Hay que destacar el valor de las repeticiones, y también el de las novedades que en su justa medida son indispensables para los niños y las niñas.
Partiendo de esta concepción desarrollamos el trabajo con los niños y niñas utilizando las siguientes estrategias y recursos :
- Rincones de actividad : La organización de la clase por "zonas" hace posible la participación activa de los niños y niñas en la construcción de sus conocimientos definiéndose dicha participación desde el respeto a los intereses y a las elecciones individuales. Estos espacios estables permiten una distribución espacial del aula y una mejor estructuración y aprovechamiento de los materiales, facilitando las oportunidades de actividad y la rotación según las prioridades de elección del niño. Con una duración variable pero determinada, posibilitan la introducción, vía los materiales o las propuestas, de diversos aspectos que se están trabajando en talleres o en proyectos. Desde un punto de vista más individual, facilitan al niño la adquisición de hábitos de organización, la asunción y utilización de pautas y normas, la autonomía y regulación del propio comportamiento y la reflexión sobre la propia actividad y su proceso.
- Esta metodología de trabajo permite a su vez, al docente, a través de la observación y la escucha activa, el reajuste de las actividades, la detección de conflictos y la evaluación no sólo de trabajo sino del proceso de puesta en práctica.
- Talleres : Organización del trabajo en torno a una tarea concreta de la cual se obtiene un resultado material o no material y que permite la participación de toda la Comunidad Escolar a la vez que genera nuevas formas de participación e innovación. Es una diversificación del proceso de enseñanza-aprendizaje que facilita a los niños y niñas no sólo el aprendizaje de una serie de "técnicas", sino también el desarrollo de la creatividad, de la autonomía, del sentido crítico, favoreciendo las situaciones de cooperación y garantizando la atención individualizada. En los talleres el papel motivador y facilitador del docente es fundamental aportando no sólo el material y el "conocimiento" sino, también, creando un ambiente acogedor y agradable.
- Pequeños Proyectos : Partiendo de un enfoque globalizador y abierto, la técnica didáctica de los Proyectos se constituye en un auténtico procedimiento de aprendizaje donde el objetivo no es la adquisición mecánica de conocimientos sino de los procedimientos para aprender de una forma autónoma. Esta "técnica", partiendo de los intereses, experiencias y conocimientos previos, permite a los niños y niñas elegir, pensar, sentir, actuar, compartir, debatir, interactuar, organizar, transformar, en definitiva, ser protagonistas de sus propios procesos de aprendizaje. El docente es, entonces, un canalizador de propuestas, un organizador de intereses y un potenciador de la búsqueda de soluciones.
- Las sesiones de psicomotricidad educativa preventiva ( Línea Acouturier): El cuerpo es fuente de descubrimiento, de comunicación, de relación y de afecto. Los niños y las niñas son seres psicomotores, es decir, que a través de sus manifestaciones psicomotrices expresan sus problemas, se comunican, operan, conceptualizan y aprenden. Por eso creemos que las prácticas educativas deben partir de una concepción de la persona en la que el cuerpo aparezca como una dimensión básica de la enseñanza y del aprendizaje.
- El trabajo corporal que asumimos puede definirse, por tanto, como un planteamiento de libertad en el que se hacen propuestas y sugieren situaciones de búsqueda, en lugar de proponer sólo actividades, aceptando que los niños y las niñas pueden hacer sus propias interpretaciones. Pero tratar que los niños y las niñas sean autónomos exige reducir el poder del adulto y estimular al alumnado a escoger, a decidir por sí mismos; animar a los niños y las niñas a que se relacionen y que resuelvan los conflictos entre ellos, ayudarles para que sean independientes y curiosos, a que usen la iniciativa al perseguir sus intereses, a tener confianza en su capacidad de resolver las cosas de forma autónoma, a dar su opinión.
Esto supone la no directividad, los educadores no dirigimos situaciones, ni imponemos deseos; proponemos, ayudamos, aportamos y colaboramos. Esta concepción conlleva, en último término, el derecho a la palabra, es decir, la reconquista de la expresión libre, tanto oral como escrita como corporal.
La sala de psicomotricidad es el espacio donde dos veces por semana los niños y niñas encuentran materiales para fomentar y promover la evolución de la expresión corporal y simbólica. La sala no es sólo un lugar de desplazamientos, un lugar físico con dimensiones y materiales determinados, sino que es un espacio cargada de vivencias, en el que cada uno puede expresarse tal y como es; lugar de placer, de descubrimientos, de encuentros; lugar para afirmarse, donde se juega y se aprende; para correr, gritar, saltar, disfrazarse, construir y destruir y expresarse abiertamente. La única limitación es el respeto a los demás y al material.
- La “sorpresa del Cucú ” : Es un "montaje" artístico y plástico a la entrada de la escuela una representación lúdica e imaginativa de la realidad que, como recursos, facilita el desarrollo de las actividades que favorecen el encuentro, el intercambio y la participación y la comunicación, a la vez que delimita los hitos temporales y ritmos de la escuela.
- Asamblea: Espacio temporal que permite "situar" al grupo y favorecer la participación y la comunicación de todos los miembros según unas pautas y normas compartidas. Como lugar de encuentro e intercambio diario, da la oportunidad de organizar la actividad, establecer los tiempos de trabajo, reflexionar y analizar las actividades, resolver las dificultades, encauzar los conflictos y facilita, al adulto, el espacio físico y temporal para presentar las ofertas de actividades y materiales y sobre todo consideramos que constituye un instrumento básico del aprendizaje del valor del diálogo, el intercambio y el respeto mutuo.
4.2. Seguridad y Equilibrio Emocional
Comprender que el niño, en su profunda dependencia del adulto, necesita sentirse bien seguro del aprecio de éste, de que cuenta con su presencia, su atención y su afecto.
La estabilidad de las personas que se ocupen del niño, la preocupación por proporcionarle señales que le ayuden a prever los cambios, el orden y la ritualización de los distintos momentos del día así como la posibilidad de relacionar fácilmente la vida familiar y la vida escolar son algunos elementos que tenemos en cuenta para respetar este principio. Esto no lleva a un esfuerzo continuo de análisis de nuestra práctica educativa.
4.3. Individualidad y Atención a la Diversidad
Supone dirigir la atención educativa a cada uno de los niños y las niñas como una persona única, ante la que nos replanteamos la intervención en función de sus necesidades particulares, de su modo de ser y sus circunstancias concretas.
Antes de los tres años los niños están inmersos en l construcción de su identidad personal, y en ese proceso la identidad que le otorgamos los adultos a los que está vinculado afectivamente consideramos que es esencial. Es por todas estas relaciones e interacciones por las que podrá llegar a saber quién es y cómo es.
Consideramos fundamental cultivar el respeto y la aceptación de las diferencias, de la individualidad y las condiciones peculiares de cada niño así como sus propios y diferentes ritmos de desarrollo.
4.4. El Juego
El juego es la actividad natural del niño y tiene una enorme importancia en su desarrollo, lo que nos hace considerarlo como algo que debe ser garantizado y estimulado.
Durante los dos primeros años el juego de los niños es sobre todo un juego de exploración para pasar posteriormente a incorporar la representación. El papel del educador adquiere una enorme importancia pues de él depende la calidad de estas actividades.
Creamos un escenario de juego que posibilite diversidad de experiencias:
- Experiencias motrices, como desplazarse, gatear, arrastrarse, andar, subir, bajar.. etc.
- Experiencias manipulativas, de manejo de objetos con características y usos diferentes.
- Experiencias perceptivo-cognitivas que implican poner atención, encontrar semejanzas, evocar, reconocer, y después imitar y representar.
- Experiencias lingüísticas, de intercambio verbal, sobre la propia acción, pero también del juego de la palabra misma, la magia de la voz y del gesto.
- Experiencias de interacción con los adultos, y con los niños y niñas, que desde muy pronto se convierten en compañeros de juego que multiplican la propia acción.
4.5. Colaboración con las familias
Partimos de la concepción de que en estas edades tan tempranas las relaciones familiares de los niños son las más importantes para su desarrollo. En el primer ciclo de la educación infantil, la colaboración entre la familia y la escuela no es sólo algo deseable, sino indispensable para el buen desarrollo de los niños y niñas.
Consideramos imprescindible, al organizar el trabajo educativo con un grupo de niños, diseñar y planificar qué se va a hacer para que la cooperación entre padres y escuela se produzca. Tenemos en cuenta los siguientes aspectos:
- La información : a través del contacto personal es necesaria para tener unos datos sobre las familias y el niño que ayudan a los educadores a entender mejor las costumbre y reacciones del niño y planear las actuaciones particulares más convenientes.
- El respeto : hacia las características y circunstancias personales de cada familia.
- El tiempo : para facilitar los contactos con las familias. Los encuentros cotidianos son momentos en los que se transmite a las familias la información sobre la actividad y la situación de sus hijos, y sobre las que se pueden ir elaborando unas relaciones positivas.
- Las reuniones con los padres , son un cauce más formalizado de información en las que hay un tiempo para poder hablar más extensamente de los niños, intercambiar puntos de vista, informar de los planes próximos y acordar los aspectos necesarios.
La planificación cuidadosa de estas estrategias para la cooperación con los padres, junto con el conocimiento suficiente de sus necesidades, y una actitud de respeto y tolerancia, pueden garantizar la participación de las familias, y el beneficio que esta implicación representa para los niños y niñas.